¿Qué es la clasificación R en las películas?

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Si te sientes un poco perdido en el laberinto de las clasificaciones cinematográficas, has llegado al lugar adecuado. A continuación, te explicamos qué es la clasificación R en las películas y su equivalente en España a través del ICAA.

Descubre cómo estas simples etiquetas pueden decidir el destino de una película y, a veces, hasta de una tarde de cine en familia.

Además, al final de este artículo, también te recomendamos la mejor formación relacionada con la industria audiovisual.

¡Adelante, la función va a comenzar!

Introducción al mundo de las clasificaciones cinematográficas

¿Alguna vez has visto la letra «R» en un cartel de cine y te has preguntado qué significa? Esta misteriosa letra indica que la película contiene material solo para adultos. Pero, ¿cómo deciden las productoras qué películas clasificar como «R»? ¿Y cómo afecta esto a lo que vas a ver en la pantalla?

Debes entender que la clasificación «R» puede usarse para censurar o para vender. Promete intensidad, con acción explícita, diálogos subidos de tono o tramas que rompen con lo establecido. Pero a menudo también señala calidad y profundidad. Son películas que no temen explorar la complejidad de la experiencia humana.

Las clasificaciones no son solo mera burocracia. Juegan un papel esencial para la industria y para ti como espectador. Son la primera guía para decidir si una película es apropiada para ti, para adolescentes o para los pequeños de casa.

En España, el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) se encarga de adaptar y aplicar estos criterios de clasificación. Siguen directrices que equilibran la libertad creativa con la protección de los espectadores. Además, tienen en cuenta nuestras particularidades culturales y valores sociales.

El proceso no es sencillo. Requiere analizar cada película cuidadosamente antes del estreno. A veces generando debate entre los expertos sobre dónde trazar la línea o cómo interpretar ciertas escenas. Pero el objetivo es claro: ayudarnos a escoger contenido acorde a nuestra sensibilidad.

En una industria cada vez más global, estas clasificaciones permiten que películas de todo el mundo lleguen a su público idóneo de forma respetuosa, ya que cada país tiene sus propias directrices, reflejo de su identidad.

Además, las clasificaciones influyen en los cines, plataformas y canales que exhibirán la película. Incluso en los horarios y tráilers con los que se promociona. Su impacto va más allá de la taquilla, influyendo en nuestra experiencia como espectadores.

Por ejemplo, ver una comedia romántica clasificada para todos los públicos no es lo mismo que ver un thriller psicológico calificado solo para adultos. Las clasificaciones nos ayudan a comprender de antemano que tipo de película vamos a ver.

¿Listo para adentrarte en la trastienda de las clasificaciones y descubrir cómo influyen en las películas que llegan a los cines? Continúa leyendo, a continuación, te explicamos cómo surge y cuando se implanta la clasificación R.

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¿Cómo surge y cuando se implanta la Clasificación R?

La icónica letra R ha sido durante décadas una señal distintiva en el mundo del cine, advirtiendo que una película contiene material solo apto para adultos. Esta clasificación fue establecida en 1968 por la Motion Picture Association (MPA) en Estados Unidos, con el fin de orientar a los espectadores sobre los diversos tipos de contenido cinematográfico.

Pero… ¿Qué significa exactamente la clasificación R en las películas?

Según las normas de la MPA, las películas calificadas como R requieren que cualquier menor de 17 años vaya acompañado por un adulto para poder verla. Además, los padres deben informarse sobre la película antes de llevar a sus hijos a verla.

Pero, ¿qué elementos concretos pueden llevar a que una película obtenga la restricción R? Entre los factores se encuentran la violencia gráfica persistente, el lenguaje vulgar frecuente, el consumo de drogas, la desnudez prolongada y las escenas sexuales explícitas y detalladas. No obstante, el proceso de clasificación va más allá de una mera lista de verificación. Lo que realmente inclina la balanza es analizar el tono general de la obra, el mensaje y la intención que hay detrás de cómo se presentan dichos elementos.

Por poner un ejemplo, la violencia con un propósito narrativo o un recurso estético puede evaluarse de forma distinta a la violencia gratuita y sin contexto. Del mismo modo, las escenas sexuales que se muestran dentro del marco de la trama pueden recibir un tratamiento más matizado que aquellas que parecen incluidas simplemente para provocar.

En su análisis, la MPA también considera seriamente las implicaciones sociales y culturales del contenido fílmico, entendiendo que las películas no sólo reflejan entretenimiento, sino también valores e ideas que inevitablemente impactan en los espectadores.

Además, en la práctica, la clasificación R puede tener un gran impacto en la distribución y el marketing de la película. Los cineastas y productores a menudo tienen que sopesar entre su visión artística y el potencial comercial de su obra, ya que una clasificación R puede limitar la audiencia y, por consiguiente, los ingresos en taquilla.

En Estados Unidos, las principales clasificaciones cinematográficas son: G (Para todos los públicos), PG (Se sugiere la orientación paterna), PG-13 (Se recomienda encarecidamente la supervisión paterna), R (Restringida) y NC-17 (Solo para adultos).

La clasificación R advierte que la cinta contiene material solo apto para adultos

Comparativa con la calificación española del ICAA

El sistema español de clasificación por edades es diferente del sistema estadounidense. El ICAA clasifica las películas en varias categorías, como «Apta para todos los públicos» y «No recomendada para menores de» diferentes edades, que varían entre los 7, 12, 16 y 18 años. También existe la categoría «X», reservada para películas con contenido explícitamente adulto, que generalmente se refiere a material pornográfico.

Esta diferenciación por edades permite a los padres o tutores decidir qué película ver en base a la naturaleza del contenido y la edad de sus hijos. Además, el Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales, un organismo autónomo pero dependiente del Ministerio de Cultura, considera el contexto cultural en el que se presentan temas como la violencia, el sexo y el lenguaje en el cine.

Lo que en Estados Unidos podría ser suficiente para obtener una clasificación R, en España podría calificarse de manera diferente si el ICAA determina que esos elementos no incluyen la descripción o narración detallada de conductas seriamente vinculadas a la violencia o a situaciones de grave abuso.

La calificación «No recomendada para menores de 16 años» en España es un ejemplo de cómo el ICAA clasifica películas con temas maduros de una manera que no necesariamente restringe el acceso a la audiencia más joven, sino que ofrece una guía para los espectadores y sus familias.

Además, las películas que en Estados Unidos reciben una clasificación R pueden ser evaluadas en España con una sensibilidad hacia la intención artística y el valor cultural, lo que a veces resulta en una clasificación menos restrictiva. La cultura española puede tener una tolerancia diferente hacia la representación de ciertos temas en el cine, lo que refleja una perspectiva que valora el contexto y la narrativa de una manera que puede diferir de la estadounidense.

En definitiva, mientras que la clasificación R de la MPA es una señal clara de contenido exclusivamente para adultos, el sistema del ICAA toma en cuenta no solo la edad sino también el contexto cultural y social en el que se reciben y se interpretan estas películas.

Influencia de la clasificación R en la industria

La clasificación R puede ser una espada de doble filo para los cineastas y productores. Por un lado, permite una libertad creativa para explorar temas complejos y adultos sin censura. Los directores pueden sumergirse en historias más oscuras, personajes más complejos y mostrar la vida con toda su cruda realidad. Por otro lado, esta libertad viene con restricciones comerciales, ya que las películas clasificadas R suelen tener un alcance de mercado más limitado.

Los distribuidores y exhibidores a menudo son más cautelosos con las películas R porque una parte significativa de la audiencia potencial —especialmente los adolescentes— se ve restringida. Esto puede afectar la cobertura de la película en los cines y, por ende, sus ingresos en taquilla. Los productores deben considerar si el potencial artístico de una película R compensará suficientemente la posible reducción en la audiencia y los ingresos.

Hay numerosos ejemplos de películas con clasificación R que han tenido un éxito notable en la taquilla, a pesar de las limitaciones de audiencia. Por ejemplo, «Joker» (2019), una película oscura y psicológicamente intensa, superó las barreras para convertirse en un fenómeno global, recaudando más de mil millones de dólares en taquilla. Esta película demostró que, con el contenido correcto y una buena estrategia de marketing, las películas R pueden alcanzar y a veces superar el éxito de sus contrapartes PG-13.

Otro ejemplo notable es «Deadpool» (2016), que revolucionó el género de superhéroes con su tono irreverente, humor negro y violencia gráfica. Su éxito demostró que hay un mercado considerable para películas de superhéroes orientadas a adultos, lo que llevó a un cambio en cómo los estudios perciben el potencial comercial de las películas con clasificación R. La nueva entrega de la saga; “Deadpool 3” (2024) vuelve a contar con la clasificación R.

Sin embargo, no todas las películas R logran este nivel de éxito. Películas como «Blade Runner 2049» (2017), aunque aclamada por la crítica y considerada visualmente impresionante, no logró el mismo impacto en taquilla, posiblemente debido a su clasificación y a una narrativa que exigió mucho de la audiencia en términos de comprensión.

La clasificación R puede influir significativamente en la dirección creativa y el destino comercial de una película, por lo que muchas producciones deciden disminuir su contenido de violencia, sexo, uso de drogas, etc. para atraer un público más amplio.

Perspectiva global: calificaciones en otros países

Ahora que ya sabes que es la clasificación R, sus diferencias con la calificación por edades en España y como puede influir en el destino comercial de una película, veamos las calificaciones de otros países.

Las clasificaciones de películas en diferentes países reflejan una amplia gama de normas culturales, sensibilidades éticas y marcos legales.

Estas algunas de ellas:

Reino Unido (BBFC)

El British Board of Film Classification (BBFC) en el Reino Unido tiene un sistema que incluye categorías como «U» para todo público, «PG» para visionado con guía parental, y luego una serie de clasificaciones basadas en la edad: 12, 15 y 18. La clasificación «R18» está reservada exclusivamente para contenido pornográfico.

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Australia (ACB)

La Australian Classification Board (ACB) clasifica las películas con etiquetas similares a otros sistemas, pero con algunos matices propios. Por ejemplo, «E» para exento de clasificación, «G» para general, «PG» para guía parental, y luego «M», «MA15+» donde los menores de 15 años deben estar acompañados por un adulto, y «R18+» para adultos. También existe «X18+», exclusivo para contenido pornográfico y legal solo en ciertos territorios.

Japón (Eirin)

En Japón, la organización de clasificación conocida como Eirin establece categorías que van desde «G» para todos los públicos hasta «R18+» para contenido adulto. La cultura japonesa tiene una actitud diferente hacia el contenido sexual en los medios, lo que se refleja en sus clasificaciones.

India (CBFC)

La Central Board of Film Certification (CBFC) en India es conocida por su estricto criterio y a menudo censura películas antes de clasificarlas. Sus categorías incluyen «U» para todo público, «UA» para menores acompañados, y «A» para adultos. También tienen una categoría «S» para películas que deben ser exhibidas solo a audiencias especializadas.

Arabia Saudita (GCAM)

En Arabia Saudita, la clasificación de películas es regulada por el General Commission for Audiovisual Media (GCAM), que introdujo categorías de clasificación tras levantar la prohibición de los cines en 2017. Las categorías incluyen «G» para audiencias generales, «PG-12», «PG-15», y «R-18» para el contenido más maduro.

Dada la naturaleza conservadora del país, las películas están sujetas a censura para alinearlas con los valores culturales y religiosos, lo que puede implicar la edición o prohibición de escenas que contengan desnudos, relaciones extramatrimoniales, o blasfemia. La clasificación de películas en Arabia Saudita refleja un compromiso entre la apertura hacia el entretenimiento internacional y la preservación de sus tradiciones.

China (NRTA)

China no tiene un sistema de clasificación de películas por edades formal. En su lugar, la Administración Nacional de Radio y Televisión (NRTA) y la Administración del Cine de China supervisan y censuran todas las películas antes de su estreno en el país. Las películas deben adherirse a estrictas normas que prohíben contenidos políticamente sensibles, representaciones negativas del gobierno, y elementos que se consideren contrarios a la moralidad o el orden social.

El contenido sexual explícito, la violencia y el uso de drogas también son censurados. Las películas extranjeras suelen ser editadas para cumplir con las regulaciones chinas, y solo un número limitado de ellas se muestra en cines chinos cada año.

Conclusión y consejos formativos

En conclusión, las clasificaciones de películas en diferentes países reflejan una amplia gama de normas culturales, sensibilidades éticas y marcos legales.

Desde el sistema de calificación detallado por edades en España hasta la ausencia de un sistema público en China, donde se aplica una censura estricta, es evidente que el cine no es simplemente una forma de entretenimiento, sino también un espejo de los valores y expectativas sociales de una nación.

Los cineastas y amantes del cine deben ser conscientes de estas diferencias y reconocer la importancia de entender el contexto cultural y regulador en el que se distribuyen y exhiben las películas.

Llegamos al final de nuestro artículo dedicado a la clasificación R en las películas, esperamos haber aclarado todas tus dudas.

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