En la locución y el doblaje la voz es tu instrumento principal de trabajo, por lo que además de desarrollar tus capacidades interpretativas, también debes aprender a usarla bien y evitar problemas que dañen tu garganta. En el artículo de hoy hablaremos sobre los mejores consejos para controlar y cuidar la voz para mejorar su sonido.
Para conseguir una buena formación en estos ámbitos te recomendamos realizar formaciones en las que te preparen profesionalmente y te informen de todos sus riesgos. Con un Curso de Doblaje o un Curso de Locución obtendrás todos los conocimientos necesarios para desarrollarte en el sector.
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Consejos para cuidar la voz
La voz es la herramienta con la que los profesionales de la locución y el doblaje construyen su trabajo. Por lo tanto, si quieres ser doblajista o locutor/a necesitas conocer algunos consejos para controlar y cuidar la voz y ser capaz de transmitir las emociones y las palabras de la forma adecuada.
Lo más común es tratar de no elevar demasiado la voz, ni hablar muy alto, pero vayamos un poco más allá.
Cómo hidratar adecuadamente las cuerdas vocales
La hidratación es fundamental para que las cuerdas vocales vibren bien. Y no, no basta únicamente con beber mucha cantidad de agua. Entonces, ¿cómo se hidratan las cuerdas vocales?
Además de beber agua para hidratar la mucosa que protege las cuerdas vocales, también sirve realizar vahos con agua caliente. Eso sí, ten especial cuidado con su temperatura. Conviene evitar el consumo de alcohol, cafeína y tabaco, porque estos, además de otros efectos perjudiciales para tu salud, aceleran la deshidratación de la garganta. Otro aspecto importante es tratar de prevenir la tos, la cual tiene lugar cuando la garganta se encuentra deshidratada.
Curso de Locución
La importancia de una buena alimentación para la voz
Además de una buena hidratación, las cuerdas vocales necesitan unas propiedades nutricionales específicas para su correcto control y cuidado.
¡Come manzanas! Esta fruta contiene pectina, una sustancia que favorece la lubricación de las cuerdas vocales. La miel y el jengibre funcionan como antiinflamatorio, por lo que son productos que puedes incluir en tu alimentación. También los carbohidratos, necesarios para mantener los músculos del aparato fonador.
La necesidad de descansar la voz y evitar el exceso de uso
Nuestro último consejo de control y cuidado de la voz para mejorar su sonido es sencillo: Duerme bien.
8 horas es el tiempo ideal de sueño para que la voz esté descansada y consiga recuperarse. Asimismo, lo mínimo recomendable son 6 horas, ya que un descanso inferior de la voz puede acarrear grandes males.
Técnicas para mejorar el sonido de la voz
Toda persona que se dedique al mundo del doblaje y locución, o cuya labor consista en utilizar su voz, necesita contar con unos conocimientos mínimos de técnica vocal.
Por ello, te traemos una serie de técnicas muy eficaces de cara a mejorar el sonido de tu voz que quizá desconocías.
Cómo respirar correctamente para controlar la voz
Respiración diafragmática. Debes entrenar tu diafragma para conocer cómo controlar la respiración y calcular la cantidad de aire que debes exhalar en cada momento.
A la hora de calentar, inhala una gran cantidad de aire en poco tiempo con la boca cerrada. Ten en cuenta que debes concentrar tu respiración en el inferior de la cavidad torácica.
La importancia de la postura en la emisión de la voz
La postura tiene mucha importancia en la calidad de nuestra voz. Trate de mantener el tronco recto, en una postura totalmente vertical. De esta forma, los músculos estarán bien situados, mejorando la respiración y, por lo tanto, la voz.
Esto no significa que debas estar totalmente rígido/a, sino que relajes tu cuerpo y te alinees de forma vertical.
Ejercicios para fortalecer y flexibilizar las cuerdas vocales
El ejercicio más común para ganar flexibilidad en las cuerdas vocales se llama “lax vox”. Consiste en soplar dentro de una botella con agua 3/4 a través de un tubo emitiendo el sonido u.
Si notas que tus mofletes comienzan a vibrar, es que lo estás haciendo bien.
En cuanto a su fortalecimiento, existen diversos ejercicios:
- Leer en voz alta
- Tararea con una pajita para sorber
- Mantén tu cuerpo en forma. La voz es un reflejo de él
- Acude a consultas con profesionales
Aspectos a tener en cuenta en el entorno laboral
Como ya hemos dicho en varias ocasiones a lo largo de este artículo, la voz es tu instrumento de trabajo, por lo que además de cuidarla durante tu tiempo libre, también debes tener en cuenta una serie de consideraciones en el entorno laboral durante tus jornadas de trabajo. Así, lograrás que la voz no se resienta con el paso de los días, y evitarás dañarla y forzarla.
Cómo adaptarse al ruido y otros factores ambientales
En las situaciones en las que haya demasiado ruido, no trates de aumentar la voz para que se te escuche, así solo conseguirás agotarla y perjudicarla.
Evita los lugares con humo, polvo, o aquellos sitios demasiado secos o demasiado húmedos. Busca los intermedios para no vivir cambios de temperatura demasiado radicales.
La importancia de mantener una buena comunicación con el equipo de trabajo
Una buena comunicación con tu equipo de trabajo ayuda a no hacer demasiados esfuerzos con tu voz. Por lo tanto, intenta tener todo claro en tu lugar de trabajo, sin altibajos ni gritos que puedan impedir la realización de tu trabajo de una forma correcta.
Trabajo en equipo, tranquilidad, disciplina y concentración.
El uso de técnicas de grabación adecuadas para evitar dañar la voz
Cantar o tararear diferentes estilos y tonos musicales sirve de gran ayuda para calentar la voz antes de empezar a locutar o doblar alguna voz. También ayuda el hecho de dar voz al texto desde diferentes tonalidades, para poner en práctica los músculos del aparato fonador y calentar las cuerdas vocales.
¡Protege tu voz con una formación especializada!
Ya sabes cuáles son los consejos y técnicas en cuanto a controlar y cuidar la voz para mejorar su sonido. Ahora solo tienes que comenzar una formación especializada que te posibilite utilizar tu voz como una herramienta de trabajo.
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