Si has llegado hasta aquí es porque te estás preguntando cuantos Premios Óscar ganó Rocky, una película, escrita y protagonizada por Sylvester Stallone y dirigida por John G. Avildsen, que relata la vida de un boxeador. No te haremos esperar para obtener una respuesta; Rocky ganó tres Premios Óscar.
Pero Rocky, además de las preciadas estatuillas doradas, fue galardonado con muchos otros premios. Si quieres descubrir la repercusión que tuvo Rocky en el momento de su estreno y conocer todos sus premios, continúa leyendo. Además, te mostraremos que elementos contribuyeron al enorme éxito del film que llevó al estrellato a Sylvester Stallone.
Rocky: una de las mejores películas deportivas de la historia
Como ya te hemos desvelado, Rocky (1976) fue galardona con 3 de los 10 premios Óscar a los que fue nominada: mejor película, director y montaje.
Además, también recibió, entre muchos otros galardones:
- El Globo de Oro a la Mejor Película-Drama.
- El Premio Bafta al mejor montaje (Richard Halsey, Scott Conrad).
- El Premio David di Donatello al mejor actor extranjero (Sylvester Stallone).
- El Premio del Sindicato de Directores a la mejor película
- El Premio de la Academia Japonesa a la mejor película extranjera.
Rocky también fue seleccionada en 2006 para su conservación por el National Film Registry de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos por ser «cultural, histórica y estéticamente significativa»
Rocky está considerada, después de Toro salvaje (1980), como una de las mejores películas sobre deportes de la historia.
Así mismo, el actor Sylvester Stallone fue elegido para el Salón de la Fama del Boxeo, ya que Rocky contribuyó a la difusión de este deporte a lo largo de todo el mundo.
Óscar 1: Mejor montaje
La 49º edición de los premios de la Academia del Cine otorgó el Óscar al mejor montaje a Rocky, un premio presentado por William Holden. No es sorprendente, pues la película tiene un trabajo meritorio de Richard Halsey y Scott Conrad en esta categoría.
Destaca sobre todo en las escenas del combate final, donde, a pesar de que solo se mostraron partes de la pelea, el espectador tiene la sensación de que vio todo el evento. Y también tiene una de las escenas más icónicas de 7º arte: la secuencia de entrenamiento en la que Sylvester Stallone hace todo tipo de hazañas con Gonna Fly como banda sonora. Si no la recuerdas, puedes encontrarla en este clip:
Rocky se llevó la estatuilla, ganando sobre All the President’s Men, de Robert L. Wolfe; Bound for Glory de Robert C. Jones y Pembroke J. Herring; Network de Alan Heim y Two-Minute Warning de Eve Newman y Walter Hannemann.
Como curiosidad también te contamos que Rocky fue la tercera película en utilizar Steadicam. El invento de Garrett Brown, estrenado por el director de fotografía Haskell Wexler en Esta tierra es mi tierra (1976), permitía por primera vez realizar travellings sin vías ni dollys.
Los mejores planos del combate final o las secuencias del entrenamiento de Rocky, con la música de Bill Conti, incluyendo la famosa escena en la que el boxeador consigue subir de forma pletórica la famosa escalinata junto al museo de las artes de Filadelfia, están rodadas con el primer estabilizador de cámara. Sin duda los planos captados con steadicam contribuyeron a realizar una magnífica edición y montaje.
Óscar 2: Mejor dirección
Diane Keaton y William Wyler anunciaron el ganador a la categoría de Mejor Dirección de 1977: John G. Avildsen. El trabajo magistral destaca por las escenas de lucha, haciéndolas dinámicas con múltiples tomas y poniendo énfasis en la involucración emocional que atraviesa las peleas. Por todo esto y mucho más, esa noche Rocky se llevó la estatuilla a casa, quedando como nominados:
- Alan J. Pakula por All the President’s Men.
- Ingmar Bergman por Ansikte mot ansikte.
- Sidney Lumet por Network.
- Lina Wertmüller por Pasqualino Settebellezze. Esto la convirtió en la primera mujer directora en recibir una nominación a los Óscars.
Óscar 3: Mejor película
No era fácil. Las películas que disputaban a la categoría de Mejor Película de los Óscar la noche del 28 de marzo de 1977 son hoy grandes clásicos del cine: All Presidents Men, Network,Taxi Driver o Bound to Glory. Sin embargo, esa velada Robert Chartoff y Irwin Winkler levantaron la estatuilla, como productores de una de las obras más celebradas de Hollywood. Un premio que presentó Jack Nicholson.
El criterio y la palabra final para entregar una estatua corresponde a la Academia, pero los críticos Chris Nashawaty y Leah Geenblatt resumen a la perfección el motivo por el que probablemente se llevó el Óscar esa noche en este artículo de Entertainment Weekly: “Rocky was precisely the movie America wanted (no, needed) in 1976, coming on the heels of Watergate and Nixon and Vietnam.”
La historia de Rocky Balboa: Un don nadie que alcanzó la gloria
Uno de los motivos del enorme éxito de Rocky es que nos presenta la vida de un hombre humilde que de la noche a la mañana alcanza la gloria.
Pero, ¿que inspiró a Stallone a escribir la historia de Rocky Balboa?
La historia, escrita por el propio Sylvester Stallone, es muy parecida a la del film Marcado por el odio (Somebody Up There Likes Me, 1956) interpretada por Paul Newman y dirigida por Robert Wise.
A pesar del parecido de Rocky con el film de Wise, parece ser que el combate de boxeo entre Muhammad Ali y Chuck Werner el 24 de marzo de 1975, fue el que inspiró a Stallone a escribir la historia de un boxeador desconocido que, luchando contra la vida, podía llegar a lo más alto.
Una vez que el actor terminó el guion, varios productores se interesaron rápidamente por su historia, pero se negó a venderla si no era él quien protagonizaba la película. Finalmente, tras un duro entrenamiento, Stallone se convirtió en Rocky Balboa, el protagonista de film.
Argumento de la película:
El film dirigido por John G. Avildsen, conocido también por ser el director de la trilogía Karate Kid, relata la vida de Rocky Balboa, un exboxeador que sobrevive en los suburbios de Filadelfia recaudando las deudas de un mafioso del barrio llamado Tony Gazzo.
El sueño de Balboa era ser un gran boxeador, pero a los 28 años solo participa en alguna velada de tercera fila. Aun así, no pierde la esperanza y sigue entrenándose para no perder la forma.
También se siente atraído por Adrianne, una joven muy tímida que trabaja en una tienda de animales. A pesar de que ella no le hace mucho caso, finalmente, gracias a la intervención de su hermano, Rocky empieza a salir con ella.
La vida parece que comienza a sonreírle a Rocky, sobre todo cuando un día el azar le proporciona la oportunidad de enfrentarse con Apollo Creed, ni más ni menos que el campeón del mundo de los pesos pesados, y disputar el título mundial.
A partir de ese momento la vida de Rocky cambia por completo y comienza a entrenar en el gimnasio de Mickey Goldmill, un excampeón de los pesos gallos en la década de los años 1920 que confía en las posibilidades de su pupilo.
Rocky se prepara a conciencia, pero tiene serias dudas sobre sus posibilidades reales. La pelea se programa para el 1 de enero de 1976, en el Philadelphia Spectrum, donde se vivirá un combate que hará historia.
Montaje y fotografía de Rocky: los motivos de su éxito
La historia de Rocky Balboa se convirtió, tras su estreno, en un éxito sin precedentes. Hasta entonces nunca una película deportiva había tenido tanta repercusión y mucho menos había ganado tres Oscar.
El film de Stallone logró tocar la fibra sensible de los espectadores de la época, mostrando que el sueño americano era posible y revitalizando la idea de que Estados Unidos es la tierra de las oportunidades.
Con apenas un millón de dólares de presupuesto, Rocky recaudó más de 200 millones y lanzó al estrellato a Stallone que hasta ese momento era un actor poco conocido.
Además, propició una franquicia compuesta hasta la fecha por 9 películas, la última Creep II en 2018. Próximamente se estrenará Creep III, aunque esta vez sin la presencia de Stallone.
Uno de los motivos del éxito de la película, además de su entrañable historia de superación, es su fabulosa fotografía, obra de James Crabe. El estilo, muy de los años 60, busca dar un aspecto realista y decadente a la trama del film. En ocasiones parece incluso que estamos viendo una cinta en blanco y negro.
La música de Rocky: un icono del deporte
No podemos obviar otro de los elementos más importantes de Rocky, su magnífica banda sonora.
El oscarizado Richard Halsey, uno de los editores del film, también fue el responsable de la elección de Bill Conti para componer la banda sonora de la película. Una elección acertada, ya que el tema principal de Rocky, Gonna Fly Now se hizo tan famoso como la película.
Actualmente, el tema del compositor de origen italiano es un icono en el mundo del deporte y un tema recurrente para lograr la motivación necesaria para alcanzar un reto difícil.
Gonna Fly Now volvió a acompañar a Rocky en la segunda entrega de la saga.
Como curiosidad te contamos que la famosa escena en la que Rocky sube la escalera del Museo de Arte de Filadelfia también se ha convertido en un icono cultural.
En 1982, una estatua de Rocky con los brazos en alto, patrocinada por el propio Stallone para la promoción de Rocky III, se colocó en lo alto de la emblemática escalinata, convirtiendo el lugar en una localización turística imprescindible para todo los que visitan la ciudad de Filadelfia.
Llegamos al final de nuestro artículo. Esperamos que hayas disfrutado con una de las mejores películas de deportes de todos los tiempos y una de las más premiadas.
En el siguiente vídeo puedes ver a un joven Jack Nicholson entregando el Óscar a la Mejor Película a los productores de Rocky, Irwin Winkler y Robert Chartoff, acompañados por Sylvester Stallone, el auténtico artífice de la película.
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