Elegir una buena paleta de colores es, sin duda, una de las decisiones que más peso tiene en cualquier proyecto creativo. Da igual si estás con el diseño de una marca, creando contenido para redes, montando una campaña publicitaria o metido en un proyecto audiovisual… los colores que eliges van a determinar en buena medida si tu trabajo funciona o no.
Y es que el color va mucho más allá de lo bonito. Es un lenguaje universal que todos captamos, casi sin darnos cuenta. Si logras dominarlo, tus proyectos tendrán muchísimo más gancho visual y comunicarán mejor.
Continúa leyendo y averigua con nosotros cómo elegir la mejor paleta de colores para cada proyecto.
¡Comenzamos!
Entiende lo básico sobre teoría del color
Antes de liarte a crear paletas, deberíamos repasar un poco los conceptos básicos. Son como los cimientos de una casa: si no están bien, da igual lo bonito que pintes luego las paredes.
La rueda cromática: tu mapa
La rueda de colores es como tu mapa para no perderte. En su versión más simple tiene doce colores organizados en tres grupos: colores primarios (rojo, azul y amarillo), secundarios (mezclas de primarios) y terciarios (mezclas de primarios y secundarios).
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Matiz, saturación y luminosidad: las tres claves
Cada color tiene tres características básicas: el matiz (el color en sí), la saturación (la intensidad) y la luminosidad (si es más claro o más oscuro). Jugando con estas tres características puedes conseguir infinitas variaciones.
Cálidos vs. fríos: temperatura con intención
¿Nunca has sentido que algunos colores te dan sensación de calidez y otros de frío? No es casualidad. Los cálidos (rojos, naranjas, amarillos) transmiten energía y cercanía, mientras los fríos (azules, verdes, violetas) aportan calma. ¿Necesitas energizar o tranquilizar? Esa es la pregunta.

Tipos de paletas de colores
¿Cómo combinamos estos colores para queden bien? Hay varios esquemas que funcionan de maravilla, dependiendo de lo que busques.
Monocromática: proyectos elegantes
La paleta monocromática usa un solo color en todas sus variaciones. Va genial para proyectos elegantes o cuando quieres que todo tenga mucha cohesión. ¿Te acuerdas de esas campañas de Apple, todas en blanco con ligeros tonos de gris?
Análogo: armonía natural
La paleta análoga usa colores vecinos en la rueda. Crea una sensación súper armoniosa, como cuando todo encaja sin esfuerzo. ¿Has visto esos diseños de bienestar que usan verdes y azules juntos? Te transmiten paz nada más verlos, ¿verdad?
Complementario: consigue contraste
La paleta complementaria coge colores de lados opuestos de la rueda. Logras máximo contraste e impacto visual. Es perfecto para cuando necesitas que algo destaque a lo grande. ¿Has visto esos carteles con texto naranja sobre fondo azul que no puedes dejar de mirar?
Triádico y tetrádico: variedad con equilibrio
Las paletas triádicas y tetrádicas usan tres o cuatro colores equidistantes en la rueda, respectivamente. Ofrecen variedad de colores manteniendo armonía, pero son más difíciles de manejar. Como cocinar un plato con muchos ingredientes: si te pasas con alguno, estropeas todo.

La psicología del color
¿Alguna vez has sentido nervios al ver algo rojo o tranquilidad con algo azul? No es coincidencia. Los colores nos afectan psicológicamente, y esto es algo que puedes usar a tu favor.
Rojo: pasión y urgencia
El rojo es como ese amigo intenso que lo da todo. Es pasión, energía, urgencia. Literalmente hace que se te acelere el corazón un poquito. ¿No te has fijado que casi todos los botones de «Comprar ahora» son rojos?
Azul: confianza y profesionalidad
El azul es el típico colega formal en quien siempre puedes confiar. Transmite calma y seriedad. ¿Has notado que casi todos los bancos lo usan? Es porque quieren que pienses: «Vale, estos tíos saben lo que hacen».
Verde: naturaleza y bienestar
El verde se asocia con naturaleza, crecimiento y equilibrio. ¿No te has dado cuenta de que casi todos los productos «bio» van de verde? Te están susurrando: «Mira qué soja natural y saludable».
Otros colores y sus personalidades
El amarillo es como ese colega que siempre está de buen humor. El negro es elegante e impecable. El blanco es minimalista y puro. Y el naranja es como el rojo, pero más relajado: energético pero amistoso.
Primero lo primero: ¿qué quieres contar y a quién?
Vale, antes de volverte loco buscando paletas de colores, para un segundo y piensa. Hazte estas dos preguntas: ¿Qué quieres conseguir exactamente con tu proyecto? ¿Y quién va a ser la persona que la va a ver? No es lo mismo querer trasmitir «¡somos la última tecnología!» que «con nosotros, puedes estar tranquilo». El mensaje lo es todo.
Ahora, ponte en el lugar de tu público. Una vez que sabes a quién le hablas, tienes que entender cómo ve el mundo. Y aquí hay dos cosas que no te puedes saltar:
La edad importa, y mucho
No es ningún secreto que respondemos a los colores de forma distinta. La gente joven suele conectarse con colores más potentes y saturados, mientras que un público más maduro o que busca algo más «serio» se siente más a gusto con tonos sobrios y elegantes.
Piénsalo, ¿te imaginas la web de un banco de inversión llena de colores fosforitos? Chirriaría un poco, ¿a qué sí? Pues eso.
¡Ojo con la cultura! Un color puede significar todo lo contrario
Y aquí viene una de las claves donde más gente pátina: el significado de un color no es universal. El ejemplo más claro es el blanco. Para nosotros es pureza, paz, una boda. Pero, ¿sabías que en muchos países de Asia es el color del luto?
Imagina montar una campaña súper alegre para el mercado chino toda de blanco… Sería una metedura de pata monumental, el equivalente a ir de luto a una boda aquí. Así que investigar un poco el contexto cultural no es una opción, ¡es obligatorio para no liarla!

Herramientas que te harán la vida más fácil
Por suerte, para confeccionar una buena paleta no hace falta que seas Picasso. Hay herramientas geniales que te ayudarán:
- Adobe Color: ¿Quieres una paleta complementaria partiendo del azul de tu logo? En dos clics la tienes.
- Coolors: Nuestro favorito. Pulsas la barra espaciadora y te va generando combinaciones al azar. Súper adictivo.
- Color Hunt: Es como el Instagram de las paletas de colores. La gente sube sus combinaciones favoritas y tú puedes explorarlas.
- Paletton: Para los más técnicos que quieren control total sobre cada matiz.

Adapta tu paleta a diferentes medios
Un color no se ve igual en todas partes. ¿Te ha pasado que diseñas algo, lo ves perfecto en tu ordenador y luego en el móvil parece otra cosa?
Digital: RGB y la vida en pantalla
En medios digitales trabajas con RGB, pero recuerda que los colores se verán diferentes según el dispositivo y pueden cansar la vista si son muy saturados.
Impresión: CMYK y sus limitaciones
En los medios impresos se utiliza CMYK, que tiene menos gama que RGB. Te recomendamos que hagas siempre pruebas de impresión.
Redes sociales: cada plataforma, su estilo
En redes sociales, cada plataforma tiene su propio estilo. Instagram va más de colores vivos, LinkedIn prefiere algo más serio… Es como vestirte para diferentes ocasiones.
Errores que debes evitar a toda costa
Hay algunos fallos que, si los evitas, ya vas por delante de muchos.
Usar demasiados colores: Es como cuando cocinas por primera vez y le echas de todo a la salsa. Limítate a 3-5 colores como mucho. Una regla práctica es 60-30-10: un color principal (60%), uno secundario (30%) y uno de acento (10%).
No tener en cuenta la legibilidad: ¿De qué sirve un diseño precioso si no se puede leer lo que pone? Asegúrate de que haya suficiente contraste, sobre todo para textos. ¿Texto amarillo sobre fondo blanco? Imposible leer.
No pensar en la versatilidad: Tu paleta debería funcionar en diferentes situaciones. ¿Tu color principal funciona tanto para un fondo como para un título?
Seguir tendencias sin pensar: Las tendencias van y vienen. Está bien estar al día, pero no sacrifiques la identidad de tu proyecto por una moda pasajera. Es como los pantalones de campana: vuelven cada cierto tiempo, pero no pegan con todo.

Paletas según el sector
Cada industria tiene sus propias reglas no escritas. ¿Te has fijado?
Tecnología: innovación y confianza
El sector tecnológico apuesta por el azul. Facebook, Twitter, LinkedIn, Paypal, IBM… ¿Coincidencia? Para nada. Se asocia con innovación y confianza.
Salud: tranquilidad y limpieza
El sector salud usa verdes y azules suaves. Transmite limpieza y tranquilidad, justo lo que quieres sentir cuando estás enfermo. ¿Te imaginas un hospital decorado en rojo intenso? Sería como entrar en una película de terror.
Finanzas: solidez y confianza
El sector financiero va de azules oscuros, grises y toques dorados. Transmiten seriedad y confianza, que es lo que esperas de quien maneja tu dinero.
Alimentación: despertar el apetito
El sector alimentario prefiere colores cálidos porque estimulan el apetito. ¿No te has fijado que casi todos los logos de comida rápida son rojos, naranjas o amarillos?

Color en el mundo audiovisual
¿Has notado cómo cambian los colores en las películas según lo que quieren transmitir?
Azul-naranja: la fórmula Hollywood
La combinación azul-naranja domina Hollywood. Esta combinación complementaria crea un contraste brutal que separa perfectamente a los personajes del fondo. La próxima vez que veas una película de acción, fíjate.
El estilo monocromático: creando mundos únicos
Las paletas monocromáticas crean mundos muy reconocibles. ¿Has visto alguna película de Wes Anderson? Son un festival de paletas controladas que crean atmósferas icónicas.
Narrativa cromática: colores que cuentan historias
La temperatura cromática cuenta historias: las escenas felices o nostálgicas suelen ir en tonos cálidos, mientras que las de tensión o tristeza van en tonos fríos. ¿Te has dado cuenta alguna vez?
Conclusión y consejos formativos
Llegamos al final de nuestro artículo. Por último, te recomendamos que mires tu paleta de colores en varios dispositivos: móvil, tablet, ordenador… ¿Se ve bien en todos? Pregunta a gente que encaje con tu público objetivo qué les transmite. A veces lo que tú ves no es lo que ven los demás. Y si algo no funciona, no tengas miedo de hacer cambios.
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Elegir los colores adecuados es un arte que mezcla conocimiento técnico, intuición y entender bien lo que quieres contar. Es como aprender a cocinar: al principio sigues recetas al pie de la letra, pero con el tiempo y la práctica, empiezas a improvisar y crear tus propias combinaciones.
El color es probablemente la herramienta más potente que tienes a tu alcance. ¿Te has parado a pensar que puede cambiar completamente la percepción de tu proyecto sin modificar nada más? Úsalo bien y verás cómo tus trabajos ganan en calidad y eficacia. ¿A qué ahora ves los colores con otros ojos?
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