David Newton, Tim Walker, Paloma Rincón… ¿Te suenan estos nombres? Son tan solo algunos ejemplos de fotógrafos/as de producto famosos/as y destacados por su impecable labor tras las cámaras. Si tu sueño es convertirte en uno de ellos, te recomendamos prestar mucha atención a su obra… ¡y no perderte este artículo! Aprende a fotografiar productos como un profesional desde cero con los pasos que te explicamos a continuación.
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Introducción a la fotografía de productos
En la era digital, la fotografía de producto se ha convertido en una habilidad indispensable para cualquier negocio que aspire a vender o dar a conocer sus productos vía online. Hoy en día, quien aprende a fotografiar productos como un profesional cuenta con una herramienta que le permite no solo incluir un catálogo visual de sus productos realmente amplio, sino también transmitir a través de imágenes las características de cada uno y la historia detrás de estos, ayudando a conectar con clientes potenciales.
Pero, ¿qué es realmente la fotografía de producto? Podemos definirla como aquella disciplina que se centra en capturar imágenes de artículos, muy precisas y atractivas, con el objetivo de venderlos o acercarlos a un público objetivo. Para lograrlo, estas imágenes no solo deben mostrar al público cómo se ve el producto, sino también para qué sirve y qué beneficios pueden obtenerse al adquirirlo.
La buena fotografía de producto hace que el cliente se detenga y observe la imagen más de cerca, dedicando algo de tiempo a observar el producto, incluso si solo está de paso por una tienda online o catálogo.
Qué equipo necesitas para aprender a hacer fotografía de productos como un profesional
Uno de los grandes errores a la hora de iniciarse en esta disciplina es creer que es imposible dar los primeros pasos sin invertir una gran fortuna. ¡Nada más lejos de la realidad! Si eres principiante en la fotografía de producto, bastará con que cuentes con un equipo adecuado compuesto por elementos esenciales, como los siguientes:
- Cámara: No es imperativo contar con una cámara de máximo nivel cuando todavía se están dando los primeros pasos, así que, con hacerte con una cámara DSLR o mirrorless estándar, pero de buena calidad, podrás dar vida a grandes creaciones.
- Lentes: Incluir una buena lente en tu maletín de herramientas es también recomendable, sobre todo una macro que te permita capturar detalles finos, o una de 24-70mm para la fotografía de productos más variados y versátiles.
- Trípode: No hay nada peor que una fotografía de producto borrosa –a menos que el objetivo de la sesión sea darles un enfoque creativo a las imágenes-, por lo que es crucial hacerse con un trípode que te ayude a mantener la cámara estable.
- Iluminación: La luz es uno de los elementos clave de la fotografía de producto, ya que ayuda a destacar los puntos clave de cada artículo, maximizando sus fortalezas y atractivos. Invierte una cantidad modesta en un kit de iluminación continua o varios flashes de estudio, según tus necesidades.
- Fondos: Lo ideal es contar con varios fondos simples para destacar los productos según sus formas y colores, creando contrastes interesantes y atractivos. Por ejemplo, hazte con uno en blanco, otro en negro y otro de algún color neutro.
Estos son los utensilios esenciales para quien desea aprender a fotografiar productos como un profesional. Ten en cuenta que, según vayas practicando y adquiriendo experiencia, y por tanto mejorando tus posibilidades económicas, podrás ir mejorando tu equipo.
Técnicas de fotografía de productos para resultados profesionales
¿Ya tienes todo tu equipo a mano y has encontrado el espacio ideal para llevar a cabo tu sesión? El siguiente paso para quien aprende a fotografiar productos como un profesional no es otro que el de pasar a la acción. Veamos algunas de las técnicas clave que ayudan a capturar imágenes de producto atractivas e impactantes. ¡Manos a la cámara!
- La iluminación, la clave. Aunque, a priori, la luz natural es la mejor en fotografía, cuando hablamos de la fotografía de producto puede beneficiarnos jugar con diferentes tipos de luz. Dura, suave, ladeada, difuminada… Busca y juega con diferentes contrastes hasta dar con la iluminación que más favorezca al producto en cuestión.
- El valor de una composición equilibrada. ¡O al contrario! Uno de los aspectos más interesantes de la fotografía de producto es que permite jugar con la composición, dando vida a las imágenes al aplicar diferentes principios como la simetría, la regla de los tercios… Prueba con todo tipo de composiciones, pero manteniendo siempre el foco en lo más importante: el producto principal.
- Juega con los ángulos. Las perspectivas pueden dar un valor añadido sorprendente a los artículos fotografiados. No tengas miedo de experimentar y crear imágenes dinámicas y llamativas que ayuden al público a percibir no solo las utilidades del producto, sino también la personalidad de la marca que hay tras él.
- Detalles amplificados. Si el producto a fotografiar tiene detalles interesantes o texturas atractivas, no dudes en sacarles partido. Recoge todos estos aspectos en las imágenes de producto para transmitir emociones y conectar lo visual con los demás sentidos.
Edición de fotos de productos: herramientas y técnicas
Después de tomar las fotografías, el trabajo no termina. De hecho, aquí es donde empieza uno de los procesos más emocionantes –y desafiantes- para quien aprende a fotografiar productos como un profesional: la edición. Estas son algunas herramientas y técnicas esenciales:
- Software de edición: puedes elegir entre opciones como Adobe Lightroom o Photoshop, ya que son especialmente recomendables para realizar ajustes clave en fotografía de producto, pero sin grandes complicaciones para aprender a utilizarlos.
- Ajustes básicos: prueba a realizar modificaciones en la luz, el contraste, el color y el balance de blancos, yendo de menos a más y poco a poco. Te sorprenderán los cambios tan drásticos que puedes aportar a las imágenes partiendo de estos elementos.
- Retoques y correcciones: la mayoría de software te permiten usar herramientas como el pincel corrector o el tampón de clonar, esenciales para eliminar imperfecciones que puedan ensuciar la imagen, pero siempre sin exagerar ni modificar el producto en exceso.
- Consistencia y coherencia: si trabajar con una serie de productos de la misma línea, marca o colección, lo ideal es mantener un estilo similar que ayude a reforzar una identidad visual cohesiva, fácil de reconocer y que cuente una historia en conjunto.
Optimización de imágenes para ecommerce
Optimizar las fotografías de producto es crucial para mejorar la experiencia del usuario y aumentar las conversiones. Con esto nos referimos a garantizar que sean del tamaño adecuado: deben ser lo suficientemente grandes para mostrar detalles importantes, pero no tan pesadas que ralenticen la carga y perjudiquen la navegación. En algunos casos, es recomendable comprimirlas, pero evitando que pierdan calidad en el proceso.
Los formatos más recomendables en fotografía de producto son: JPEG para fotografías y PNG para imágenes con transparencias.
Además, no subestimes la importancia de los nombres de archivo y el texto alternativo de las imágenes, sobre todo si estás creando material para compartir en el ámbito digital, como tiendas online, redes sociales, páginas web corporativas o ecommerce. Utiliza descripciones claras que incluyan palabras clave sobre el producto: es fundamental para mejorar el SEO y ayudar a que los motores de búsqueda encuentren los productos.
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